Las compañías de fabricación de automóviles Audi y Volkswagen has sido víctimas de la filtración de datos de más de 3 millones de clientes o posibles clientes en Canadá y Estados Unidos.
La substracción de la información de los usuarios proviene del robo de un proveedor externo contratada por ambas empresas entre 2014 y 2019. En la mayoría de los casos, la información, proviene de las bases de datos de marketing donde se almacenaba información básica de los propietarios o potenciales compradores como dirección postal, correo electrónico o el teléfono.
En el caso de unos 90.000 usuarios se filtraron datos especialmente privados, como fechas de nacimiento, números de la seguridad social, carnet de conducir o la cuenta con Audi o Volkswagen.
Las compañías no han revelado el nombre del proveedor que produjo la fuga de daros y emitieron un comunicado conjunto pidiendo disculpas por los inconvenientes causados tanto a sus clientes como a los posibles futuros clientes de ambas marcas.